La expresidenta argentina Cristina Fernández (2007-2015) reiteró este miércoles sus acusaciones sobre posibles conexiones políticas en el intento de asesinato que sufrió el 1 de septiembre de 2022 y criticó la falta de investigación sobre los presuntos autores intelectuales del ataque.
Fernández compareció como testigo en el Tribunal Oral en lo Criminal Federal N° 6 de Argentina, en el Edificio Comodoro Py de Buenos Aires, en el marco del juicio por el atentado ocurrido mientras ejercía como vicepresidenta (2019-2023).
La exmandataria señaló al diputado del partido Propuesta Republicana (PRO), Gerardo Milman, y su vínculo con el grupo de extrema derecha Revolución Federal, que en varias ocasiones expresó odio hacia ella. Fernández relató que Milman presentó un proyecto criticando la seguridad de la vicepresidencia y que en dicho documento se mencionaba la posibilidad de que alguien intentara asesinarla. Según Fernández, Milman fue escuchado en una conversación informal diciendo: “cuando la maten, voy a estar en la costa”, lo cual fue reportado por un asesor del peronista Frente de Todos.
Fernández denunció nuevamente la falta de una investigación adecuada sobre los supuestos “instigadores” y “financiadores” del ataque, sugiriendo que podrían estar siendo protegidos por la Justicia Federal. En sus palabras, sería ingenuo pensar que las personas actualmente imputadas son quienes idearon el atentado.
La expresidenta se refirió a los tres imputados en el caso: Fernando Sabag Montiel, quien admitió en junio haber intentado disparar contra ella por considerarla “corrupta”; Brenda Uliarte, novia de Montiel e imputada como coautora; y Nicolás Carrizo, acusado de ser partícipe secundario del intento de asesinato.
El testimonio de Fernández, único en la jornada de hoy, se realizó tras casi dos meses del inicio del juicio, que comenzó el 26 de junio, y después de las declaraciones de los imputados, quienes estuvieron presentes durante la audiencia. Al concluir su testimonio, Cristina Fernández afirmó que el Poder Judicial ha protegido y sigue protegiendo a los ideólogos y financiadores del ataque, calificando esto como una deuda pendiente con la democracia y la ciudadanía.
Fernández abandonó la sala entre aplausos y muestras de apoyo, y el juicio se reanudará el próximo miércoles.