Tampico, México.- La tormenta tropical Alberto se debilitó el jueves al avanzar tierra adentro en el noreste de México tras provocar fuertes lluvias en varias partes de la árida región, y dejar al menos cuatro personas muertas.
Los remanentes de Alberto, la primera con nombre de la temporada, se esparcieron sobre la región central del país por la tarde, según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés).
Sin embargo, los meteorólogos afirmaron que aún se esperaban fuertes lluvias con precipitaciones de varios centímetros (pulgadas) en los estados mexicanos de Tamaulipas, Nuevo León y Coahuila. En el sur de Texas, se pronostica que las lluvias disminuyan el jueves.
Inmediatamente después de tocar tierra en Tampico, se produjo una decepción inicial por la escasa cantidad de lluvia. Se han producido chubascos esporádicos en las primeras horas de la mañana, e incluso el sol salió por momentos.
“Teníamos la esperanza de que se viniera porque se necesita demasiado el agua aquí, pero lo que veo se fue por otra parte”, dijo Marta Alicia Hernández, una residente de Tampico.
Tierra adentro se reportaron daños por las fuertes lluvias en los estados vecinos de Nuevo León y Veracruz,
Allí, las autoridades de protección civil reportaron al menos cuatro muertes relacionadas con las lluvias provocadas por Alberto. Un hombre murió en el río La Silla, en la ciudad de Monterrey, capital del estado, y dos menores fallecieron por descargas eléctricas en el municipio de Allende. Los medios locales informaron que los menores viajaban en bicicleta bajo la lluvia.
Además, la madrugada del jueves murió un hombre por descarga eléctrica al tratar de reparar una mufa en su casa en el municipio El Carmen, indicó Protección Civil de Nuevo León.
El agua también arrastró un tramo de una importante autopista que conecta las ciudades de Monterrey y Saltillo.
El gobernador de Nuevo León, Samuel García, anunció en su cuenta de la red social X la suspensión del servicio de metro y transporte público en la zona metropolitana de Monterrey desde la noche del miércoles hasta el mediodía del jueves por el paso de la tormenta.
Al sur, en el estado de Veracruz, 24 familias quedaron sin hogar en la capital Xalapa después de que un muro de contención cayó encima de tres edificios a causa de las fuertes lluvias.
Los residentes escucharon un fuerte estruendo y el piso comenzó a moverse a primeras horas de la mañana.
“Yo creí que era un temblor”, dijo Pedro Luna Sánchez, quien había sido dueño de un apartamento en uno de los edificios durante 26 años. “Me asomé por la ventana y vi a mi vecino pidiendo ayuda. Vi bien y la barda estaba ya sobre los edificios”.
Todos los residentes pudieron escapar a salvo.
Alberto ha provocado alertas de tormenta en la mayor parte de la línea costera del Golfo de México, desde Texas hasta Veracruz. La tormenta llegó a tierra con vientos máximos sostenidos de 75 km/h (45 mph).
En el estado de Tamaulipas, donde Alberto tocó tierra, las escuelas fueron cerradas. Se prepararon refugios en todo el estado para recibir a los residentes que traten de escapar de las inundaciones.
Se esperan de 13 a 25 centímetros (5 a 10 pulgadas) de lluvia en algunas partes del noreste de México y del sureste de Texas, y es posible que se produzcan cantidades aisladas aún mayores, de acuerdo con el NHC. En algunos lugares más altos de México podrían caer hasta 50 centímetros (20 pulgadas) de lluvia, que podrían provocar deslaves e inundaciones repentinas, especialmente en los estados de Tamaulipas, Coahuila y Nuevo León.
Alberto también provocó lluvias e inundaciones en las costas de Texas.
En Estados Unidos, el Servicio Meteorológico Nacional (NWS) señaló que el principal riesgo en la parte costera del sur de Texas son las inundaciones debidas al exceso de lluvias. El miércoles, en distintas áreas a lo largo de la zona costera de Texas se produjeron algunas inundaciones en caminos y peligrosas corrientes de resaca, y pudieron verse trombas frente a la costa.
El alcalde de Corpus Christi, Texas, tenía planeado solicitar una declaratoria de desastres después de que parte de la ciudad recibieron hasta 15 centímetros (6 pulgadas) de lluvia el miércoles, indicó una vocera. Residentes informaron daños por el agua y los vientos, y canales resultaron afectados en la parte norte de Isla Del Padre, dijo la portavoz Brianna Sandoval el jueves.
Dos personas fueron rescatas de vehículos que quedaron varados en caminos inundados, y la caída de un cable obligó a desviar el tránsito durante una parte de la mañana. La ciudad seguía bajo alerta de inundaciones.
Bert Dagnon, quien el miércoles cerró su tienda de regalos en Galveston como medida preventiva, señaló que no cayó tanta lluvia como se pronosticaba y que no hubo un gran impacto en el área, salvo por las inundaciones en zonas bajas.
“Sospecho que todos limpiarán, trapearán y seguirán adelante”, dijo el jueves, añadiendo que ya tenía clientes en su local mientras los cielos se despejaban en la zona de la playa.
En el poblado de Surfside Beach, una ciudad texana situada en una isla de barrera, el oleaje producido por las tormentas de la mañana del jueves dejó algunos caminos dañados y una gran cantidad de escombros, pero “muy pocos daños” en las estructuras, que son principalmente elevadas, indicó el alcalde, Gregg Bisso.
El oleaje se desvaneció en las últimas horas de la mañana y “casi es posible caminar por ahí ahora”, dijo. Bisso afirmó que la isla tiene una población de cerca de 800 residentes de tiempo completo, con hasta 10.000 vacacionistas en verano.
Octavio González, residente de Tampico, estaba visiblemente decepcionado con las pocas lluvias provocadas por Alberto.
“Cayó muy poca agua”, dijo. “Estamos en este lado del sur de Tamaulipas con mucha sequía y la verdad tenemos esperanza en el agua”.
AP