A diferencia de años anteriores el primer bebé nacido en la República Dominicana no dejó en evidencia problemáticas sociales importante que tiene el país.
En esta ocasión, se trató de bebé por partida doble pues dos hospitales se disputan el primer nacimiento del año.
Las criaturas Emma y Eyden nacidos en dos de las principales maternidades del país; el Universitario Maternidad Nuestra Señora de la Altagracia y el Materno Infantil San Lorenzo de Los Mina, respectivamente, tuvieron un peso estables, son de padres dominicanos y adultos. no producto del embarazo adolescente.
Todos los bebés son grandes bendiciones y forjarán el futuro de la nación, pero una de los flagelos más difíciles de combatir en el país es precisamente el embarazo adolescente que roba oportunidades a la juventud dominicana y reproduce rápidamente la pobreza.
Mientras que los partos de extranjeras indocumentadas, específicamente haitianas, según las autoridades es una llave abierta en el presupuesto sanitario y también incrementa de forma importante las muertes materno-infantil pues durante el embarazo son nulos los chequeos de rutinas por ginecólogos lo que complica bastante la labor de parto a los doctores.