Santo Domingo, RD.-El Sindicato de Trabajadores Playeros de Boca Chica, encabezado por su secretario general, Pancracio Sosa, manifestó su firme rechazo a los desalojos masivos impulsados por la Alcaldía, al considerar que esta medida pone en riesgo la estabilidad económica de cientos de familias que dependen directamente del turismo en la zona.
En una concentración pacífica realizada este jueves 20 de febrero, trabajadores y comerciantes recorrieron las calles desde el Hotel Hamaca hasta Marina Zarpar, expresando su descontento ante lo que calificaron como una amenaza para su sustento. Denunciaron que no han sido tomados en cuenta en los planes de desarrollo turístico y advirtieron sobre el impacto negativo que esta medida tendría en el empleo local.
Impacto económico y social de los desalojos
El turismo es el principal motor económico de Boca Chica, generando miles de empleos directos e indirectos. Sin embargo, el plan de desalojo de la Alcaldía afectaría a vendedores ambulantes, operadores de deportes acuáticos, pequeños comerciantes y trabajadores de servicios turísticos, dejándolos sin fuentes de ingresos.
“Nosotros no estamos en contra del desarrollo de Boca Chica, pero queremos ser parte de este proceso, no ser desplazados sin opciones. Llevamos años trabajando aquí, generando empleo y contribuyendo con la economía local. No podemos permitir que se nos saque sin justificación y sin un plan de reubicación digno”, expresó Pancracio Sosa.
El sindicato advirtió que, de ejecutarse la medida sin alternativas viables, podría generarse una crisis social en la comunidad, con aumento del desempleo, deterioro de la seguridad social y crecimiento de la informalidad laboral.
Llamado al diálogo y advertencia de nuevas protestas
El sindicato instó a la Alcaldía de Boca Chica, al Ministerio de Turismo y a otras instancias gubernamentales a establecer una mesa de diálogo para encontrar soluciones equitativas. Enfatizaron que el desarrollo turístico debe ser inclusivo y sostenible, garantizando la estabilidad de quienes han trabajado en la playa durante años.
“Exigimos que se detengan los desalojos y que se nos incluya en la planificación turística. No queremos conflicto, queremos diálogo y soluciones. Si las autoridades no responden, tomaremos medidas más contundentes para defender nuestro derecho al trabajo”, advirtió Sosa.
Próximas acciones
Los trabajadores anunciaron que, si no reciben respuestas favorables, intensificarán sus manifestaciones con nuevas jornadas de protesta pacífica en los próximos días. Además, solicitaron el apoyo de organizaciones de derechos humanos y actores del sector turístico para frenar los desalojos y garantizar un desarrollo equilibrado en la comunidad.