Washington.- El director ejecutivo de Boeing, Dave Calhoun, anunció este lunes que dejará su cargo a finales de este año, una salida que llega tras la crisis abierta en la compañía por el incidente a bordo de un vuelo de Alaska Airlines el pasado mes de enero.
“Quiero compartir con ustedes que he decidido que este será mi último año como director ejecutivo de nuestra gran empresa y he notificado a la junta directiva esa decisión”, apuntó Calhoun en un comunicado.
Un texto que inicia, precisamente, mencionando el incidente que sucedió en enero, cuando se desprendió en pleno vuelo un panel que cubría el espacio para una puerta de emergencia de un Boeing 737 Max-9 de la aerolínea Alaska Airlines.
“Como todos saben, el accidente del vuelo 1282 de Alaska Airlines fue un momento decisivo para Boeing. Debemos seguir respondiendo a este accidente con humildad y total transparencia”, apuntó.
Los ojos puestos sobre Boeing
La crisis que vive Boeing, el segundo mayor fabricante de aviones comerciales del mundo tras la europea Airbus, se inició hace cinco años cuando dos 737 Max-8 se estrellaron en similares circunstancias en octubre de 2018 y marzo de 2019, provocando la muerte de 346 personas.
“Los ojos del mundo están puestos en nosotros y sé que saldremos de este momento como una mejor compañía, aprovechando todos los aprendizajes que acumulamos mientras trabajamos juntos para reconstruir Boeing durante los últimos años”, apuntó Calhoun, que llevaba ejerciendo como director general de la empresa desde enero de 2020.
Su salida no será la única, ya que la compañía llevará a cabo numerosos cambios en su directiva en los próximos meses. Entre ellos la salida de su actual presidente, Larry Kellner, que será sustituido por Steve Mollenkopf.
Agencia: EFE