Nueva York.- La decisión de España de no participar en la toma de posesión de la nueva presidenta de México “a ningún nivel” después de que no se incluyera al rey en la invitación supone un nuevo desencuentro diplomático con ese país con el que se cierra el mandato de Andrés Manuel López Obrador, quien llegó a plantear “una pausa” en las relaciones con España.
El Gobierno español subraya que la decisión de no enviar a ningún representante a la toma de posesión de la nueva presidenta de México al haber excluido a Felipe VI de la invitación a ese acto, se ha adoptado en defensa del jefe del Estado y ante una actitud de ese país que afirma que no se entiende.
Después de que México no incluyera al rey en esa invitación para la toma de posesión de Claudia Sheinbaum, el Ministerio de Asuntos Exteriores hizo público un comunicado rechazando esa actitud que considera “inaceptable” y avanzando que España no tendrá ningún representante en ese acto el próximo 1 de octubre.
Claudia Sheinbaum ha anunciado que responderá este miércoles por carta a través de las redes sociales.
En defensa del jefe del Estado
Fuentes del Gobierno sí recalcaron que lo que ha hecho el Ejecutivo con su comunicado es salir en defensa del jefe del Estado, en una reacción lógica, clara y contundente.
Recuerdan que Felipe VI es quien acude a las tomas de posesión de los presidentes iberoamericanos y es reconocido y querido en esa comunidad.
Por todo ello, insisten en que el Gobierno ha hecho lo que tenía que hacer ante una decisión que no se entiende, y si México no invita al rey, como respuesta, ha acordado que no va nadie en representación de España.
México exige disculpas por la “conquista española”
Sobre los motivos por los que México ha adoptado esa decisión, las fuentes citadas emplazan a que esa pregunta se haga al Gobierno de ese país, al que recalcan que unen, no obstante, estrechas relaciones.
La que será a partir del 1 de octubre nueva presidenta de México dijo a finales de julio estar de acuerdo en que debe haber una petición de perdón por parte de España por “la conquista española” que dejó “muchas masacres y violencia”, aunque insistió en mantener las relaciones bilaterales.
Desde 2019, el ahora presidente saliente Andrés Manuel López Obrador, ha venido insistiendo en que España debe ofrecer disculpas a México por los abusos cometidos en la conquista, una petición que llegó a hacer incluso por carta a Felipe VI.
EFE